sábado, 6 de abril de 2013

Y van siete...


Siete años desde que mi sonrisa, pese a la GRAN alegría que me proporcionan mis dos princesas a cada momento, ya no luce como era, siete años que han pasado sin que un solo momento haya podido dejar de echar de menos tu olor, tus palabras... Tu compañía que, aún siendo intermitente en muchos momentos, era tan necesaria para mí.

Siempre a mi lado... Con tu sonrisa y con tus lágrimas, pero siempre ahí... En una batalla tan dura y larga...




Ama, mi vida, han pasado ya siete años desde que te fuiste un día como hoy, con el sol... Hoy a las 19:15 más o menos, seguro que otro escalofrío recorrerá mi cuerpo, como cada año... Como me sucedió en aquel momento...

Pero esta vez, tendré un antídoto de luz y de alegría que me hará pasar el trago de mejor manera... :)



Un par de luceros que tú enviaste para que se me quitara la pena.

Ojalá te pudiera dar este beso y acompañarlo con el olor de estas preciosas flores.


Te quiero ama.

Os quiero enanas.

Mamá.